Hoy día hablaba con unos amigos sobre que haríamos si tuviésemos muuuucha plata. Frases como no trabajaría más o viajar todo el tiempo salieron a colación. Incluso me dijeron: “Por ejemplo tu Cata, imagínate que si tuvieses mucha plata podrías grabar un documental cada vez que quisieras y no tendrías que esforzarte en hacer actividades para reunir fondos y sacarlo adelante”
Obvio! Sería genial poder hacer eso, pero rápidamente recapacité. No sé si es tan bueno, ya que sacar algo a costa de esfuerzo te obliga a ser creativo, a trabajar con más dedicación, a armar redes e involucrar a más gente.
Este fin de semana tuvimos fiesta Cáucaso, la Fondeski. Es la cuarta fiesta realizada por Proyecto Cáucaso. Además hemos realizado dos conciertos de guitarra clásica. En cada uno de estos eventos buscamos no solo reunir fondos para seguir adelante con la post producción, sino que buscamos mantener el ambiente de espera para el estreno del documental.
No somos una productora de eventos. Cada actividad que organizamos y la hacemos pensando en la red de personas que se nos ha unido al proyecto y como compartir con todos un poco de lo que fue nuestra experiencia en el Cáucaso.
No es fácil. No siempre se tiene el éxito que se espera.
Claro que sería más fácil tener toda la plata del mundo y no depender de las actividades organizadas para seguir adelante.
Sería bastante más fácil si no dependiéramos de ganar fondos concursables para terminar la post producción
Pero cada uno de los esfuerzos que hacemos, nos permite fortalecer más el proyecto, hacerlo más coherente, nos permite darlo a conocer a quienes serán el público de nuestro documental y sobre todo, le da a Proyecto Cáucaso un valor incalculable.
Este miércoles se cumple un año desde que tomamos el avión rumbo a Armenia, nuestro primer destino. En ese entonces no sabíamos como se venía la mano. Atrás se había quedado la pre producción, ahí comenzaba la producción. Nos habíamos preparado lo mejor posible para esta segunda etapa, pero no sabíamos que la más desafiante sería la tercera, en la que nos encontramos hoy: la post producción.
Es difícil porque es la más lenta. Es la que requiere mayor trabajo y dedicación. Todo lo obtenido en los meses de grabación tiene que transformarse en un producto coherente, interesante y atractivo para quienes lo vean.
Un proyecto como el nuestro, no tiene financiamiento directo de nadie sino que se ha ido construyendo gracias a fondos concursables y al apoyo de quienes han creído en nosotros y nos han acompañado en las diversas actividades que hemos realizado.
Pero seguimos adelante.
Todavía nos queda la recta final.
Y si me pongo a pensar en lo que conversábamos hoy, de tener la plata para hacer todo más fácil, me quedo con la idea de sacar el proyecto como lo hemos hecho hasta ahora.
Cuesta.
No es fácil.
Pero llegará el momento que uno mire atrás y diga que valió la pena.
Por Cata
Vale la pena
domingo, septiembre 09, 2007 Publicadas por proyectocaucaso a la/s 11:12 p. m.
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3 comentarios:
Familia Cáucaso:
Si, valió la pena que hoy sigan tan unidos que cuando partieron. Si, valiò la pena por la cantidad de personas que los sigue.
Si, valió la pena si es que ustedes aún "se creen el cuento".
Si, valió la pena que hayan sido capaces de llegar al "hoy" con las mismas ganas de hace un año.
Si, vale la pena el que sus familias y amigos se emocionen con la "locura/volada" que se "mandaron".
Un beso grande. Paulina
Cierto, muy cierto. Y muy de acuerdo con ustedes. Siempre las cosas trabajadas hasta el fondo dan más frutos y tienen raíces más fuertes. Porque como dijo Al pacino en Perfume de Mujer "El camino correcto siempre es el más difícil". Un fuerte abrazo, felicitaciones, y mucha fuerza estimado Proyecto Caúcaso.
Nico
Si tuvieran toda la plata del mundo la vida sería harto más aburrida.
Muchos saludos y suerte en lo que les queda.
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